¿Cómo funcionan las calderas eléctricas industriales de agua caliente?

Las calderas eléctricas de agua caliente calientan el agua mediante elementos calefactores resistivos o electrodos alimentados por electricidad. A continuación, el agua calentada circula por un sistema de circuito cerrado para satisfacer la demanda de calefacción de la aplicación. A diferencia de las calderas de combustión, las calderas eléctricas de agua caliente no necesitan quemadores ni combustible, lo que simplifica el diseño general del sistema.

Aunque las calderas eléctricas de agua caliente pueden ofrecer un alto rendimiento en la conversión de electricidad en calor, sus costes de funcionamiento están muy influidos por los precios de la electricidad. Además, suelen ser más apropiadas para aplicaciones con necesidades de calefacción moderadas, ya que son menos eficaces para sistemas a gran escala en comparación con las calderas de combustión.

Consideraciones clave a la hora de elegir una caldera eléctrica de agua caliente industrial

La elección de la caldera eléctrica de agua caliente adecuada para su aplicación requiere la evaluación de una serie de factores diferentes:

Funcionamiento sin emisiones

Las calderas eléctricas no producen emisiones in situ, lo que las hace atractivas en zonas con una normativa medioambiental estricta. Sin embargo, la huella de carbono global depende de la fuente de electricidad.

Eficiencia frente a coste

Las calderas eléctricas funcionan con un rendimiento cercano al 99%, pero el coste de la electricidad suele hacerlas menos económicas para aplicaciones a gran escala o de alta demanda.

Limitaciones de capacidad

Estas calderas son más adecuadas para cargas pequeñas y medianas debido a las limitaciones de la red eléctrica y a los mayores costes operativos a mayor escala.

Mantenimiento más sencillo

Con menos componentes mecánicos, las calderas eléctricas de agua caliente requieren menos mantenimiento periódico que las calderas de combustión.